sábado, 10 de diciembre de 2011

La realidad de los medios de masas

Los medios de comunicación juegan un papel muy importante en el ámbito de informar a la gente. Cada día entramos en contacto con periódicos, radio y televisión para adquirir información, de manera que estemos actualizados sobre los principales sucesos que nos rodean, pero pocas veces nos detenemos para analizar cuál es el impacto que generan en la sociedad. No es común que un conjunto de personas se pregunten el porqué de los temas o noticias que se abordan en los medios, o la manera en cómo estos son tratados. Claro, un solo individuo puedo llegar a estos cuestionamientos si cuenta con las suficientes herramientas críticas, pero esto no sucede que las masas, y es algo que los medios masivos saben muy bien.


Generalmente el objetivo de los medios de comunicación son las grandes masas, a estas van dirigidos sus contenidos. Y es esta característica la que facilita la creación (o también es válido el término “manipulación”) de realidades. Después de todo es más fácil hacer pasar como realidad un mensaje si este llega al mayor número de personas, algo que también está muy ligado con la legitimidad atribuida al medio.

Sería erróneo pensar que lo visto, escuchado o leído a diario en los medios es la única cara de la realidad, pues desde mi punto de vista es tan solo una manera de interpretar y moldear dicha realidad y exponerla socialmente. Esto hecho a través de los diversos intereses que pueden tener los medios, como lo pueden ser fines propagandísticos, económicos, políticos o hasta persuasivos. Es por eso que muchas veces la manera de tratar un tema varía radicalmente de un medio a otro.

A mi consideración el mayor riesgo que los medios de comunicación representan hacia las masas es el elegir qué temas serán los expuestos hacia ella, es decir, de qué se hablará en las masas y de qué no. No podemos dudar que el poder de los medios llega a sobrepasar el de instituciones y diversos aparatos político-sociales, llegando al grado de decidir los medios lo que será noticia en la sociedad. Y el peligro está en que todavía nos dejamos llevar por lo expuesto en los medios, hablamos sobre lo que dicen ellos en lugar de hacerlo con nosotros mismos para conocer lo que sucede, es decir, dejamos a un lado la comunicación que podemos tener como individuos participes de una realidad, para enfocarnos solo a la que están interesados en ofrecernos. Al compartir nuestras experiencias, ideas e interpretaciones se puede construir una visión conjunta de la realidad que vivimos, y en ella entraría cada aspecto que define nuestro contexto.

Pareciera ser que este proceso de concienciación aún está demasiado lejos de llevarse a cabo, pero desde mi perspectiva ya se está dando gracias a internet, y aún más específicamente a las redes sociales. La expansión y evolución de este medio permite no solo ser otro canal para el fluir de la información presentada en televisión, radio y prensa, sino también posibilita la creación de contenidos por parte de cualquier usuario. Pese a que su alcance aun no es global, a través de internet las masas logran comunicarse entre ellas, obteniendo así aquellas otras caras de la realidad que los llevan a actuar para mejorar en diversos aspectos (sociales, económicos, políticos), afortunadamente ya son muchos los casos con lo que se puede ejemplificar este hecho, donde las ideas de la sociedad se unen para lograr cambios políticos. Esto resulta benéfico en el sentido de que la comunicación se da en el lado social, con intereses que atañen a la misma, mas no a los de una empresa generadora de ideas.

A mi parecer es completamente valido (y hasta natural) que las masas se valgan de herramientas como internet y las redes sociales para evolucionar en sociedades activas, el problema está cuando incluso a través de estas se manejan intereses que impidan su uso de manera libre, o peor aun cuando se priva a la sociedad de este medio que posibilita la apertura de diversos caminos conductores hacia el desarrollo, viéndose obligada a buscar nuevas alternativas para mejorar su realidad y luchar contra aquellas que son impuestas.

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